20 millones 537 mil plazas se han esfumando en un solo un mes, lo ganado en 10 años. Hay que recordar que cuando nuestro vecino se enferma de neumonía atípica, disfraz oficial del Covid-19, a México lo afectará con un infarto, que necesitara terapia intensiva de varios años para recuperarse. 

De acuerdo con el Departamento del Trabajo de EU, en el mes de marzo del año 2020, existían 151 millones 582 mil trabajadores no agropecuarios ocupados, para el mes de abril sumaron 131 millones 045 mil. Según el reporte oficial se perdieron 20 millones 537 mil empleos, fenómeno provocado por los cambios instrumentados para contener los efectos de la pandemia Covid-19. Superando con creces la crisis del 2008, que se derivó principalmente por venta de valores de activos tóxicos hipotecarios. Por primera vez, los banqueros de Wall Street hoy no son los culpables.

Sirva el panorama anterior para tomar en serio la crisis económico-social que padecemos los mexicanos, sabedores que venimos de un retroceso en la economía del año 2019, que de diciembre del 2018 a marzo 2020 (17 meses), solamente se crearon 25 mil 017 empleos IMSS. Es imperativo olvidarse de la economía “mágica”, como la meta de 2 millones de nuevos empleos en 9 meses, hay que reactivar la producción de bienes y servicios, crear empleos. Para ello, lo primero es combatir la violencia, beneficiar a todo el país con obras de infraestructura intensivas en mano de obra, con los recursos que hoy se utilizan en obras faraónicas con un futuro incierto, ante un turismo internacional seriamente dañado, no se diga de la aviación e industria petrolera.

(Esta es una tarjeta informativa del economista Alejandro Soto Domínguez)