Hasta donde Política al Día se ha enterado, la Reforma Electoral en Veracruz que aprobó en días pasados el Congreso Local contará con el apoyo y ratificación del número de cabildos necesarios que marca la Constitución local. 

La Reforma que, entre otras cosas, recorta prerrogativas a los partidos políticos es popular en el sentido de la pérdida de confianza que hoy en día registran esos institutos y lo atractivo que representa un ahorro de 2 mil millones de pesos al erario. 

En realidad, poco trabajo han debido hacer los operadores políticos de Morena puesto que los propios alcaldes se han acercado al Congreso y a Palacio para expresar su apoyo. 

Así, ediles incluso de oposición expresan que no les afectará el recorte puesto que las dirigencias partidistas de hecho no lo reparten equitativamente con las estructuras distritales ni municipales. Es más, comentan que en los procesos electorales cada candidato se  rasca con sus propias uñas y ganan -cuando así sucede- con sus propios liderazgos, simpatías y recursos. 

Hoy no ganan los partidos, aseguran, ganan los candidatos, y muchos hasta han sido capaces de volver a ser alcaldes dos o hasta tres veces por diferentes partidos. 

Por ello, en la cuenta de las actas a favor ya se encuentran los 15 alcaldes del Partido Verde y de otro buen número de alcaldes de oposición. 

Cierto, ha habido algunos ayuntamientos que han rechazado la Reforma, pero en realidad son los menos y no serán mayoría. Caso curioso, por ejemplo, el de Coatzacoalcos, cuyo alcalde surgido de las filas de Morena desaprobó la Reforma pero ese es un caso que se cocina aparte, pues él bien sabe que en cuanto a la política ya no quiere queso sino salir de la ratonera. 

La Reforma Electoral va, la aprobarán los ayuntamientos y será Constitucional… le pese a quien le pese.