El distinguido economista Alejandro Soto Domínguez comparte la siguiente ficha informativa con respecto a los puestos de trabajo: 

En los últimos tres meses, suman 1 millón 030 mil 366 trabajadores que perdieron su empleo con prestaciones sociales. En Veracruz para este mismo periodo la disminución fue de 46 mil 663 plazas. Mucho circo por las mañanas, donde el domador con su látigo dirige la orquesta de los payasos para distraer al pueblo, nada de efectividad, en salud, seguridad y economía.

El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), informa que al mes de mayo 2020, el número de trabajadores asegurados asociados a un empleo, suman 19 millones 583 mil 170, en mes anterior había 19 millones 927 mil 170. Lo que resulta una pérdida de 344 mil 526  empleos IMSS, y sí agregamos la caída de marzo-abril(899 mil 773), suman 1 millón 030 mil 366 de empleo afectados por el Covid-19. Veracruz no es la excepción, siempre cooperando en engrandecer la crisis, en febrero  había 757 mil 110 trabajadores cotizantes IMSS, en mayo resultan 710 mil 447, se esfumaron 46 mil 663 plazas. El salto para atrás en empleo formal fue de diez años, tanto para el  ámbito nacional, como para el estado. El hambre, sangre y desesperación corren por doquier

Que se entienda, al perder sus fuentes de ingreso la clase trabajadora, afectará al consumo, con ello la demanda de bienes y servicios. Si agregamos el infierno de la violencia y las fallas en salud, no se vislumbra una recuperación a corto y mediano plazo. Los gobiernos están cruzados de brazos, los desempleado y empresarios se están rascado con su propias uñas, los municipios nada más saben prohibir la apertura de los negocios, para beneplácito de los inspectores, se les adelantó el aguinaldo. Cuando menos es la que observo en Xalapa.