Así se tituló el Express publicado aquí el pasado 12 del presente mes, porque esos eran los números que teníamos cuando aún se realizaba el proceso de ratificación o rechazo de la Reforma Constitucional Electoral.

Así se veía y así sucedió.

127 cabildos ratificaron la Reforma con la que los Partidos Políticos perdieron el 50% de los recursos públicos, lo que en realidad resulta ser mínimo comparado con la zozobra en la que irán a un proceso electoral intermedio sin el control absoluto del conteo de votos ya que la Reforma también incluye la eliminación de los Consejos Municipales, por lo que los votos de la contienda electoral ahora serán contados en solo 30 distritos electorales y no en las oficinas que de hecho podían controlar los alcaldes.

¡Un verdadero amarre de manos! 

¿Lo vieron así las dirigencias estatales de los partidos? Es probable que no, de lo contrario su operación política se hubiera concentrado a fondo para convencer a sus alcaldes y cabildos de lo que se les venía encima; pero no lo hicieron, prefirieron buscar excusas tontas y los reflectores mediáticos gratuitos que les da ir a un café y sentarse a hablar y hablar delante de reporteros.

Hoy el PAN, PRI y PRD, quizá no lloran por el recorte presupuestal de 177 millones de pesos anuales que perdieron, sino porque quedó demostrado su poca fuerza y control de políticos emanados de sus filas partidistas que los hace pensar muy seriamente en los próximos comicios electorales intermedios del 2021.

¿Entonces qué? ¿Se les desinflaron o no las llantas al PAN, PRI y PRD?