Vaya caso que se ha presentado en Moloacán, en donde desafortunadamente dos excelentes personas fallecieron por COVID-19 y que tuvieron en sus manos la enorme responsabilidad de conducir el municipio. 

A principios de agosto de este 2020, falleció Victoria Rasgado, joven alcaldesa de Moloacán, tras una falla renal derivado de complicaciones por COVID-19. 

Ahora, quien suplió a Victoria Rasgado por tan solo 86 días, también falleció por problemas derivados del COVID-19. 

María del Carmen Prieto Mortera, había suplido a Victoria, y este día, alrededor de las 5 de la mañana, perdió la vida debido a un paro cardíaco, complicación del COVID-19, en el hospital de Especialidades de IMSS de Orizaba, Veracruz. 

Muchos se preguntan qué viene para Moloacán ahora que han fallecido la alcaldesa titular y su suplente, y muchos apuestan a que haya una prelación y suba la persona que ocupa la sindicatura. 

Sin embargo, la Ley Orgánica del Municipio Libre indica en su artículo 25, que cuando se trate de ausencias definitivas “corresponderá al Congreso del Estado o a la Diputación Permanente autorizar la separación y llamar al suplente”. Y “si debiere llamarse al suplente y faltare también éste, el Congreso del Estado o la Diputación Permanente designarán, de entre los demás ediles, a quien deberá ejercer el cargo temporalmente o para concluir el período constitucional”. 

Así que los próximos pasos están en la cancha del Congreso Local, que será el que designe a la brevedad quién deberá suplir a la recién fallecida Carmen Prieto.