Nombramientos como el que este día mereció el Secretario de Finanzas y Planeación de Veracruz, José Luis Lima Franco, no son fortuitos, tienen que ver indudablemente con el apoyo y reconocimiento que tienen en la Federación. 

Hoy, Lima Franco fue nombrado por unanimidad como miembro de la Comisión Permanente de Funcionarios Fiscales y en la Comisión de Vigilancia de Participaciones, y tendrá, con ello, la importantísima distinción de representar y llevar la voz de la región integrada por los estados de Veracruz, Puebla, Chiapas y Oaxaca, en la discusión del Pacto Fiscal. 

Desde el inicio de la presente administración se especulaba sobre su cercanía con el anterior Secretario de Hacienda, e incluso se pensó que su posición se vería debilitada con la llegada de Arturo Herrera a la SHCP, sin embargo, poco a poco Veracruz ha estado recibiendo el reconocimiento de las autoridades financieras del país y del extranjero, pues las calificadoras internacionales han ido mejorando la calificación crediticia del Estado. 

Ahora, ante la importante labor que se tiene enfrente de sostener o modificar el Pacto Fiscal, es que Lima Franco tiene la encomienda de defender los intereses de todos los mexicanos, sin distingos partidistas, sin filias y sin fobias. 

Mucho se ha hablado en Veracruz de la austeridad y la transparencia, y esto es algo que están detectando no solo las calificadoras y los bancos (los cuales han podido ofrecer mejores condiciones para la reestructuración de la deuda de Veracruz), sino que es muy seguro que haya sido detectado por quien manda en Palacio Nacional. 

No sería extraño que al Secretario de Finanzas se le esté considerando en el Altiplano como uno de los mejores funcionarios del Morenismo; cuando menos en Veracruz es sin duda de los mejores Secretarios de Cuitláhuac García Jiménez, quien le encomendó uno de los mayores problemas del Estado y lo está sacando con dedicación y eficiencia. Al principio del sexenio las Finanzas estaban dentro de los dolores de cabeza de Veracruz, y ahora ya no.