Y de repente pareciera que el mundo se le cae encima al político consentido de Veracruz, diputado federal con licencia Héctor Yunes Landa. 

La noche se le viene encima a don Héctor y hoy ronda sobre su cabeza el fantasma de la expulsión del PRI, partido que durante años le dio de beber de las mejores mamilas del presupuesto público y lo convirtieron en alto funcionario público estatal, diputado local, federal, Senador y de nuevo diputado federal.  

El PRI que le permitió todo, ser líder de bancadas, delegado nacional en estados que le importaban a Los Pinos, y de pilón convertirse en padrino de sus mejores e incondicionales amigos y familiares para llevarlos al Congreso, alcaldías y delegaciones federales. 

Pero al parecer de repente don Héctor se hastió de tanto halago, de tanta miel, de tanta adulación pública, de tanta manga ancha y decidió montar otro partido estatal que le sirviera de red en el trapecio para sus afanes de permanecer en la cima de la política, asegurar una curul estatal plurinominal y llegar pleno de “pinche poder” (parafraseando a los clásicos) en el 2024 para volver intentar ser gobernador de Veracruz. 

Peeeeeeeeeero, como dicen que el pez por la boca muere y por sus obras los conocerán, la filtración de un comprometedor video mostró sus malas cartas ya que de propia voz Héctor confiesa haber sido partícipe de la creación del partido político estatal ‘Todos por Veracruz’ con el único fin de participar en elecciones. 

No obstante, se aprovechó de su gran amistad con el actual líder nacional del PRI, Alejandro Moreno Cárdenas –Alito-, quien lo consintió en San Lázaro convirtiéndolo en su vocero oficial y le permitió incluir a sus amigos e incondicionales en los mejores lugares de las planillas municipales propuestas por el PRI estatal por las alcaldías. ¡Ojo! No lo los nombró en las planillas de su partido recién creado, sino que de mala fe, buscó quitarles oportunidades a militantes del PRI que picaron piedra y colaboraron en el gran rescate y conformación de un PRI que se quedó en la lona después de la catástrofe electoral del 2018. 

Lo anterior fue calificado por muchos como reprobables artimañas políticas que no tuvieron –al conocerse- más que airadas y ríspidas reacciones de al menos 11 Presidentes de Comités Municipales del PRI, que en representación de sus militancias exigen la expulsión del diputado Héctor Yunes Landa del partido tricolor. 

Estos, más los que se acumulen en el transcurso de la semana, son los directivos municipales que han puesto en el camino de Héctor Yunes Landa la piedra más grande de su carrera política: 

Jorge García Pérez - Presidente PRI Córdoba. 

Alfredo Niño Flores, Presidente del PRI en Xalapa. 

Carlos Troncoso Delgado, Presidente del PRI en el Puerto de Veracruz. 

Rafael Aguilar Martínez - Presidente PRI Yanga. 

Víctor Castellanos Flores - Presidente PRI Pánuco. 

Anabel Reyes Munguía - Presidenta PRI Totutla. 

Omar Martínez Aranda - Presidente PRI San Andrés Tuxtla. 

Mario Ariza - Presidente PRI Nogales. 

Hugo Rafael Pimentel López - Presidente PRI Camarón de Tejeda. 

Alfredo Escobar Peñaloza - Presidente PRI Álamo Temapache. 

Alberto Merino - Presidente PRI Maltrata. 

Pese a lo anterior, quizá la gran amistad de Héctor con ‘Alito’ Moreno logre apaciguar el temporal y aún le alcance para ejercer la diputación local plurinominal que ya trae en la bolsa, pero don Héctor ya no será, de aquí en adelante, el mismo entre los priistas. Al tiempo.