En el 2018, durante el periodo en que Andrés Manuel López Obrador fue declarado presidente electo y su toma de protesta, si bien se dio un periodo de transición terso, de facto Peña Nieto dejó de ser presidente. 

AMLO le metió la pierna y no dejó que Peña Nieto hiciera ya nada trascendente. El discurso lopezobradorista fue “hay que ir ganando tiempo”, lo que le dio justificación para, entre otras cosas, tirar línea a los nuevos diputados morenistas para la creación de la Secretaría de Seguridad Pública, la elección del nuevo Fiscal de la República, reunirse con los miembros de la Suprema Corte de Justicia, entre otros. 

Lo anterior propició que se generara un vacío de poder que en nada abonó a México, pues el que se iba no podía gobernar y el que entraba no tenía facultades para hacerlo. 

Algo similar empezó a ocurrir en Xalapa ahora que Ricardo Ahued ganó la elección. 

La intención del actual alcalde Hipólito Rodríguez Herrero de colocar parquímetros en algunas calles de la capital Xalapa, no es popular… pero es una decisión que debe tomar el actual Cabildo y cargar con esa responsabilidad. 

El que Ricardo Ahued se pronuncie en contra de dicha u otras medidas, genera vacíos de poder. 

A AMLO se le criticó el meterle la pierna a Peña Nieto y no pocos analistas y actores políticos pedían Sana Distancia. 

Se entiende que Ahued sea una persona combativa y directa, pero como dicen, mejor “no coman ansias”.