Este domingo el Portal Sociedad 3.0 publicó una noticia que llama la atención por cualquier punto que se le quiera ver: ‘Aparece la periodista Alejandra Rosas Borbonio´ el tema es que hasta ese momento había pasado desapercibido que la periodista hubiera desaparecido ni había trascendido más allá de las redes sociales en las que según el portal mencionado informó:

 ‘El hijo de la periodista veracruzana Alejandra Rosas Borbonio reportó en redes sociales que desde el sábado no había podido localizarla, cuando aparentemente se dirigía de Xalapa a Córdoba’

Jesús E R. hizo público que desde ayer no tenía contacto con su mamá: ‘Si alguien la localiza o sabe de su paradero favor de comunicarse con su hijo vía facebook”, publicaban compañeros reporteros de la capital del estado.

Este domingo por la mañana, la comunicadora emite su propio mensaje en que agradece la preocupación e informa que ya está en casa, después de pasar las horas más largas de su vida, pero que, dijo, no puede explicar.

Da gusto que la periodista ya esté en casa, claro que sí, pero el motivo de la desaparición aunque sea por un corto tiempo no debe quedar al aire, las autoridades deben investigar a fondo cuál fue la causa de su desaparición y cuáles fueron esas ‘causas ajenas a mi persona, mi trabajo y mi vida personal, que me hicieron pasar las horas más largas de mi vida, según lo escrito por la propia periodista, pues en ello bien cabe la posibilidad de que su desaparición pudiera ser como ella expresa ajena a su voluntad, lo que desde sí perfecciona un presunto delito.

Qué bueno que la compañera Alejandra ya está con bien en su casa y con los suyos, pero de que el caso debe ser investigado y aclarado es una condición obligada.

Esperemos más adelante cuáles son las reacciones de la autoridad, pues aunque la periodista no haya presentado aún una denuncia de ley, lo escrito en su red social sí da margen para que las autoridades intervengan y se pueda saber qué fueron esas causas ajenas a su persona.