Para no pocos resultó extraña la defensa que hizo Juan Antonio Nemi Dib, ex secretario de Salud de Veracruz, de la ex esposa del ex gobernador de Veracruz, Javier Duarte de Ochoa, preso en el Reclusorio Norte de la CDMX.

Sin embargo, Nemi Dib fue consistente con su pensar, pues no hay señalamientos contrarios a su muy personal decisión de acudir –ante el llamado de la defensa de Karime Macías- como testigo de manera virtual ante la Corte de Magistrados de Westminster, en Londres, para la segunda audiencia del juicio de extradición a México que enfrenta en Inglaterra.

Si bien se respeta -y mucho- la decisión personalísima de Juan Antonio Nemi Dib, gente de principios, honesto y que de sobra ha demostrado ser muy capaz y recto en los cargos públicos que ha ostentado, lo que extraña es que haya puesto las manos al fuego por Karime Macías y la haya descrito como perseguida política.

Nemi es un muy buen amigo y muchos quisieran tener amigos como él. La pregunta es, en estricto sentido ¿Hasta dónde la declaración voluntaria de Nemi Dib puede pesar sobre la decisión del Juez que debe decidir sobre la extradición de Karime Macías Tubilla? Nemi Dib no auditó las cuentas de Karime, como tampoco tendrán mucho peso el que Karime se haya declarado, -este jueves en Londres-, inocente de los cargos de que se le acusan por un presunto fraude. Este jueves Karime Macías se presentó a la audiencia de manera presencial para la segunda audiencia en la que se ventila su posible extradición a México, donde enfrenta cargos por presuntos desvíos de dinero cuando presidió la oficina estatal del Desarrollo Integral de la Familia (DIF) en el Gobierno de Veracruz, entre 2011 y 2012, que ascenderían a 112 millones de pesos.

Y es que en este y otros casos parecidos, no se trata de la estima justificada o no que alguien pueda tener por ella, se trata de que se enfrente a la justicia y pueda echar abajo las pruebas que ameritaran que se le girara orden de aprehensión y solicitud de extradición.

Karime Macías Tubilla, vive actualmente en Londres desde el 2019, en calidad de libertad bajo fianza y portadora de un brazalete electrónico de localización luego de ser detenida en esa ciudad en octubre del 2019 y acude a firmar periódicamente en una estación de policía con el impedimento de acercarse a estaciones marítimas, terrestres y aéreas.

De ser extraditada a México, como lo ha solicitado la Fiscalía General de la República, y de resultar culpable, Karime Macías Tubilla podría pasar de 5 a 12 años de prisión por los presuntos delitos que cometió en agravio del erario público estatal, motivo por el que desde 2018 se giró una orden de aprehensión en su contra, misma que no ha podido ser cumplimentada pues, en un principio, se desconocía su paradero.

Quienes conocen el proceso que llevan los juicios de extradición en Inglaterra suponen que sea la próxima semana cuando se conozca el veredicto del juicio de extradición de la ex presidenta del DIF veracruzano.