Sin que necesariamente tuviera que venir a Veracruz el presidente Andrés Manuel López Obrador a inaugurar el tramo de la autopista de Laguna Verde a Nautla de poco más de 124 kilómetros, hoy simplemente fue abierta al público. 

Es más, ni siquiera el gobernador del estado, Cuitláhuac García Jiménez, estuvo presente y eso que es una obra largamente esperada por los veracruzanos y que gobiernos federales anteriores dejaron inconclusa. 

Lo anterior, se debió a que por el momento hay veda electoral y por ello ni el presidente ni el gobernador podían hacer promoción en caso de haber evento… podían estar presentes, pero sin promocionarlo, pero eso no impidió que si ya estaba terminada la autopista se pusiera en uso. 

Con ese tramo de 124 kilómetros y todos los tramos de autopista  que ya estaban en funcionamiento, habrá un ahorro de tiempo de casi tres horas para quienes viajen desde el Puerto de Veracruz hasta el municipio de Pueblo Viejo, el último de la geografía veracruzana. 

Era tan importante que se terminara ese tramo de 124 kilómetros de autopista porque con ello se conecta todo el corredor vial desde Veracruz hasta Monterrey con un ramal hasta Matamoros. 

Lo que sí se sabe es que al término de la veda, AMLO y Cuitláhuac García Jiménez recorrerán juntos parte de la autopista para que quede oficialmente inaugurada. 

¿Qué pasaría si de aquí para el real agarran esa costumbre de que obra terminada se ponga en uso y no se tenga que esperar hasta que los señores funcionarios públicos tengan tiempo de llegar y cortar el listón y posar para las fotos? No estaría mal, ¿No cree?