Esta mañana en los cafés de la capital veracruzana, los sabios bebedores de la cafeína caliente y humeante en su filosofada diaria pusieron en la mesa el tema del Titular de Sefiplan, José Luis Lima Franco, quien tal vez Usted no lo sepa, pero fue elegido el año pasado como presidente de la Comisión Permanente de los funcionarios fiscales de todo el país, es decir, de sus homólogos de cada Estado. 

Lo que se destaca es que esta Comisión funciona… y que además funciona muy bien bajo la batuta del veracruzano. 

Y es que cada día la Comisión pesa más y más y ha dejado de ser una voz que clama en el desierto y ya no sirve solo para que los titulares de las finanzas de cada Estado se reunieran a comer galletas, tomarse el café, desahogar actas de reuniones anteriores, tomarse la foto y luego concentrarse en un muy buen restaurante a comer y echarse los tragos más finos que se puedan tener en existencia. 

¿Sabía usted o tenía noticias de que esta Comisión Permanente había sesionado hasta la anterior en 143 ocasiones? Y todo claro, con cargo a los contribuyentes. 

Pero eso ha pasado a la historia bajo la dirigencia de Lima Franco, pues hoy se maneja un agenda en la que se involucra a los funcionarios hacendarios del Gobierno Federal, es decir, a los que debían ser los interlocutores permanentes, a los que deben liberar oportunamente los recursos federales para los Estados, con quienes reciben los recursos fiscales de todo el país, todo bajo convenios de coordinación fiscal. 

Se sabe que en la más reciente reunión de la Comisión realizada en Cancún en un hotel de medio pelo, participó personalmente el subsecretario de Hacienda, Gabriel Yorio, y el Procurador Fiscal de la Federación, Félix Arturo Medina, así como Fernando Baca, titular de la Unidad de Coordinación con Entidades Federativas de Hacienda. Además, y por si fuera poco, también asistieron los que arrastran el lápiz, los administradores generales de Recaudación y de Servicios al Contribuyente, Luis Abel Romero y Claudia Rivera. 

Y algunos aún se preguntan qué tuvo que pasar en Veracruz y concretamente en la Sefiplan para que de pronto el tema financiero haya dejado de ser la preocupación número uno, carnada y queja recurrente en campañas políticas que muchos ofrecieron resolver y que al llegar al gobierno lo que hacían era agravarlo. 

Al buen entendedor pocas palabras. Algo trae entre sus activos ese joven economista de Poza Rica que sin medir tamaños ni grandes medallas en el pecho, ha dado resultados históricos para Veracruz en materia financiera tanto de captación de ingresos, gastos aplicados con disciplina y austeridad republicana y haber vendido al comprador de chatarras la tan gastada licuadora de la impunidad financiera. 

Es por eso que esta mañana los sabios bebedores del aromático veracruzano, de su bolsa ya se cooperaron para invitarle a Lima Franco el menú completo, con lecheros, banderillas y los huevos tirados que dicen le ha puesto a su trabajo.