El diputado local de MORENA, Juan Javier Gómez Cazarín, desde que llegó a la anterior legislatura estatal dio muestras de madurez y sensibilidad que no se esperaba que alguien mostrara en las filas de ese reciente movimiento político.

El primer campanazo que dio Juan Javier Gómez Cazarín fue cuando le ganó la coordinación de la bancada de MORENA a su paisano, el también diputado Amado Cruz Malpica, quien ya había ejercido el cargo en la legislatura anterior como coordinador y no pocos esperaban que repitiera.

Desde ahí, el nombre de Juan Javier Gómez Cazarín empezó a tomar fuerza y a colocarse en el escenario futurista local y desde luego a convertirse obligadamente en una pieza clave.

A Juan Javier Gómez Cazarín lo han querido subir al ring en no pocas ocasiones, por ejemplo, contra la virtual candidata de MORENA para el 24 por el gobierno de Veracruz, Rocío Nahle García, con el titular de la SEGOB Eric Cisneros Burgos, con el titular de la SEV Zenyazen Escobar García, así como con el delegado federal de Bienestar Manuel Huerta Ladrón de Guevara. Inclusive, lo han querido contrapuntear contra la titular del ORFIS Delia González Cobos.  

Lo anterior ha sido contrarrestado de inmediato y en abierto por Juan Javier Gómez Cazarín, que, de forma por demás oportuna y madurez le ha sabido salir al paso con sinceridad y claridad a las navajas filosas que le avientan encima, un día si y otro también, para buscar desestabilizar las huestes de MORENA en Veracruz.

Coloquialmente se podría decir que Gómez Cazarín le sabe bien al teje y maneje del fogón, como para no dejar que las chispas provoquen incendios mortales en el campo amigo.

Así, Gómez Cazarín al final del día ha sabido alejar de encima de sí posibles tormentas que de no actuar oportunamente le hubieran convertido ya en piedras en el zapato para aquellos que como él están definitivamente en la gorda baraja futurista de MORENA.

Hoy se ve calma en el ejido guinda, colaboración y coordinación con la bancada local y federal de MORENA, así como con sus compañeros de partido Eric Cisneros, Zenyazen Escobar y Manuel Huerta.

Lo cierto es que lo que viene -no es cuestión de hacerle al adivino- Gómez Cazarín tiene por delante un camino franco y pavimentado en espera solo de las circunstancias.