Los mal pensados bebedores de café aseguraban que el exgobernador de Chihuahua César Duarte Jáquez durante el sexenio 2010-2016, jamás sería extraditado a México porque el Gobierno de los Estados Unidos lo protegería.

Y parecía ser cierto, puesto que desde el pasado 8 de noviembre del 2021, una corte del Distrito Sur de Florida había ordenado la extradición de César Duarte, los días, semanas y meses pasaban y Duarte Jáquez seguía en los Estados Unidos.

Sin embargo, el exgobernador ya está en suelo mexicano y será juzgado en su propia tierra para responder por la fabulosa cantidad de 21 órdenes de aprehensión, 20 de las cuales fueron obtenidas de jueces por la Fiscalía General del Estado de Chihuahua y otra por la Fiscalía Especializada en Delitos Electorales (Fepade).

César Duarte será juzgado por asociación delictuosa y peculado, corrupción y fraude por el despojo de millones de dólares en fondos gubernamentales durante su mandato en Chihuahua. Delitos graves que acumulan al menos mil 230 millones de pesos.

Lo curioso es que mientras a nivel nacional el PAN y el PRI buscan ir juntos por las elecciones del 2024 quién prometió desde su campaña un castigo ejemplar al priista César Duarte, fue la actual gobernadora panista de ese estado Maru Campos, quien, al enterarse de la extradición en comento, de inmediato subió a las redes sociales un video en el que festeja el hecho y recalcó que para el exgobernador César Duarte ‘No habrá perdón ni olvido’.