Poco o nada de vuelo mereció el hecho de que la Comisión Permanente del Congreso de la Unión, solicitó al gobernador de Veracruz Cuitláhuac García Jiménez, un informe, sobre el estado que guardan los permisos de extracción de roca basáltica del Cerro Balzapote en la Reserva de la Biósfera de los Tuxtlas.

En sesión de la permanente, a solicitud del Grupo Legislativo del PAN, también se requirió un informe a los titulares de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales, la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente, la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas y el Fondo Nacional de Fomento al Turismo.

El Grupo Legislativo del PAN argumenta que en la actual administración federal de Andrés Manuel López Obrador se están utilizando los permisos otorgados para el aprovechamiento de la roca del Cerro de Balzapote en la Reserva de los Tuxtlas para la ampliación del Puerto de Veracruz en la administración del presidente Peña Nieto, y ahora se están utilizando para la construcción del Tren Maya en la Península de Yucatán.

De igual forma se solicitaron datos sobre los planes de mitigación para remediar la devastación natural que ha causado la desaparición del Cerro de Balzapote, en la Reserva de la Biosfera de los Tuxtlas, municipio de San Andrés Tuxtla, Veracruz.

El hecho es que así como se han ido cayendo una a una las trabas que desde partidos políticos, empresarios y grupos ecologistas, también esta exigencia del PAN caiga igual, pues se sabe que lo que se autorizó utilizar se refería al volumen de roca y no el destino que se le daría.