Ayer se mencionó aquí que algo estaba pasando con la economía mexicana y se dijo que lo que ven analistas del capital que asesoran a inversionistas locales y extranjeros no se está percibiendo igual a nivel del público.

Ayer, el director de este portal, Francisco Licona apuntó en su columna "Figuras y Figurones" que el mercado interno del país está entrando a una etapa de dinamismo antes no observada y anotó como ejemplos la anunciada próxima apertura de 50 nuevas marcas de gasolinerías. Otro ejemplo que se anotó en la columna, fue el anuncio del Grupo de Inversionistas de Fomento Económico Mexicano (FEMSA) de impulsar en todo el país sus tiendas Bara, que funcionan en esquinas de barrios con un formato de descuento similar a Oxxo, su joya de la corona de Retail, filiar también de Femsa.  

Lo anterior sin contar que otras empresas internacionales como Tesla, productora de autos eléctricos y energía solar, traen locos a los gobernadores mexicanos que se disputan mediáticamente porque sea en sus estados donde finalmente se localice la multimillonaria inversión que han anunciado hacer en México.

Lo anterior se puede explicar con base en el crecimiento de la economía mexicana en el 2022 que fue de 3.1% la que finalmente acabó superando la meta del 3% para ese año a pesar de la epidemia del COVID-19 y la Guerra Rusia Ucrania.

En el país, de acuerdo con las cifras oficiales del PIB recién publicadas por el INEGI, las actividades secundarias que tienen que ver con la industria y la transformación que alcanzó un crecimiento de 3.3% en el año pasado superior en poco al crecimiento del ramo de los servicios que registraron un 2.8% igual que el sector primario agropecuario. Es decir, el sector secundario está jalando ya al de servicios, lo cual da fortaleza de largo plazo a la economía.

Otro factor que ha influido en el dinamismo de la economía mexicana han sido los acuerdos en controversias comerciales entre México-USA-Canadá y la fortaleza que ha mantenido el peso mexicano frente al dólar estadounidense el cual este mismo sábado alcanzó al abrir los 18.36 por dólar y ayer viernes cerró en 18.39 pesos por unidad.

Así que por decir algo, la economía nacional no gira en el mismo sentido que los discursos políticos radicalizados y polarizados, en los que todo es blanco o negro; según sus intereses y esperanzas. Afortunadamente.