Tras permanecer una semana en la Torre Médica del Centro de Reinserción Social Tepepan por motivos de salud -se le había subido la presión a tope-, el exprocurador general de la República Jesús Murillo Karam, ya está de regreso en su celda del Reclusorio Norte de la CDMX. 

El exprocurador está siendo investigado y en prisión preventiva justificada, señalado e implicado por el Caso de los 43 normalistas de Ayotzinapa. 

Los abogados de Murillo Karam se han quejado de que a su cliente no se le practicaron exámenes de rigor para saber el origen de este padecimiento y acusaron que en su estancia en la Torre Médica sólo le adminstraron medicamentos para regular su presión arterial. 

¿Pues qué más querían? 

Lo que sí hay que recordar que desde que ingresaron al exprocurador general de la República sus abogados y familiares argumentaron que Murillo Karam está en serio peligro de padecer un evento vascular cerebral y que por ello debían mantenerlo en algún lugar especializado con lo que desde luego no se cuenta en el Reclusorio Norte.