No cabe duda, las borracheras del poder hacen valiente al más taimado, pero también las crudas hacen humilde a los más valentones.

Pocos son los que pueden ver el panorama actual rumbo a las sucesiones federal y estatal con objetividad y sin apasionamientos.

La realidad es que el Poder Federal Electoral y la Corte ha dado muestras de no dejar pasar nada que huela a ilegalidad.

Muestras ya son demasiadas.

Pero eso solo lo pueden ver pocos.

El hecho es que a las corcholatas y corcholatitas locales les comen las ansias por caer en manos del INE, del TRIFE y de la Corte.

A pesar de que desde la dirigencia nacional de MORENA y del TRIFE les han leído la cartilla de lo que pueden y no pueden hacer las corcholatas, la mayoría insiste en prometer y proponer acciones como si fueran candidatos y algunos más allá, como si fueran ya el próximo ejecutivo federal.

Aquí en Veracruz, aún sin que arranque un proceso parecido al federal, no pocas corcholatitas hacen lo mismo.

Y saben qué: ¡Se los van a tronar! ¡Muchos serán bajados del caballo! ¡Muchos van a llorar!

Al menos aquí, las corcholatitas debían escuchar a Marlon Ramírez Marín, que, aunque es de otro partido parece estar más interesado en salvarle el pellejo político a los de enfrente al advertirles que ‘No por mucho madrugar amanece más temprano’.

Marlon les advierte que ‘Se les podría caer la candidatura a los adelantados que andan colocando propaganda por todo el estado para promocionar su imagen y que el PRI está documentando los casos, que obviamente irán a parar tarde o temprano al TRIFE y a la Corte.

Así que a las corcholatitas adelantadas no les haría nada mal aprovechar que Marlon la anda haciendo al abogado del diablo y sin el cobro de honorarios.

Más les vale, pues a como están las cosas podrán librar al OPLE y al TEV, pero en las instancias federales podrían darle dolorosos palos que los separe del proceso grande del 24.