Para quienes les gusta el Rey de los deportes les dará gusto saber que el Águila de Veracruz le ganó el quinto juego y como visitante al poderoso equipo de los Pericos de Puebla.

Fue una paliza con pizarra final de 16 a 7.

El Águila que al parecer ha despertado luego de perder los tres primeros juegos, dos en casa y otro más en Puebla encendieron a punta de batazos la fase de playoffs por el gallardete de la zona sur.

El día anterior angustiosamente los aguiluchos lograron quitarse la modorra y con batazos estratégicos y un buen corrido de bases lograron alzarse con la victoria y obligar al quinto juego de la serie.

En la ofensiva, del juego de anoche, destacaron el primera base dominicano Edwin Espinal quien a leñazos produjo 5 carreras. Al hombre se le vio furioso con el bat luego de los dos juegos de ser suspendido por la bronca que se armó en el segundo juego en el Beto Ávila.  

Lo que llama la atención es que durante la temporada regular el Águila ganó muchos juegos y series como visitante, pero en casa parece ser que pierde ponch y ha sido vencido fácilmente y en este playoff se ha cumplido esa triste cábala. En casa perdieron los dos primeros juegos y en Puebla ganaron dos y perdieron uno.

Habrá que ver si en casa logran vencer esa cábala y darles a los veracruzanos el gusto de tener de nuevo a un Águila campeón al menos de zona.