La historia de Rafael Hernández Villalpando es muy especial en la política. Saltó a la fama luego de mandar que los camiones de basura fueran descargados enfrente de la puerta principal de Palacio de Gobierno de Veracruz en protesta por la falta de apoyo que le daba según él el gobernador Miguel Alemán Velasco.

Eso y que en cierta ocasión fue rector de la UV y el cuento chino aquel de que fue levantado y golpeado salvajemente para que se retirara de la política, lo demás referente al actual diputado federal no hay nada.

Precisamente, a eso es quizá a lo que se refirió en conferencia de prensa su suplente como diputado federal por MORENA Tomás Segura Rivera, al señalar que ‘Villalpando’ -como se le conoce, apellido mucho más elegante que el de ‘Hernández’- no le ha respondido al electorado xalapeño.

Segura Rivera se debe referir ni más ni menos a los dos periodos que se ha pasado de vacaciones y con gastos pagados allá en la Cámara de Diputados.

Y es que el pueblo quedó tan chocado de tanta rata cañalera, chapulines postulados por el PAN, PRI y PRD que en la transición a un mejor gobierno muchos como el mismo Rafael Hernández Villalpando han ganado elecciones con el mínimo esfuerzo.

La muestra de lo anterior la expuso el mismo Tomás Segura Rivera quien confesó ante medios de comunicación que quiere ocupar la curul vacante que dejará ‘Villalpando’ ya que él sí reparte el periódico Regeneración casa por casa, sección por sección los domingos en la capital veracruzana.

Vaya tipo.

Le faltó decir que si una vaca ganó una curul federal por el solo hecho de ser postulado por MORENA, otra también podrá.