En cada municipio hay una gran cantidad de familias políticas que se acoplaron con los Yunes del Estero, sobre todo cuando el jefe del Clan fue gobernador y luego cuando éste intentó heredar a su hijo el trono mayor del estado.

Y es que los yunistas, que no panistas, como lo afirmó el senador Yunes Márquez, no son pocos y están por todos lados. Solo recuerden la cantidad de votos que lograron y por el escaso margen que perdieron en contra del MORENO Cuitláhuac García Jiménez; tanto poder pensaron tener en las urnas los yunistas que hacían cuentas de que habían llegado para no irse jamás.

Pero la política es mucho más compleja de lo que se puede ver en el momento.
Hoy, por un lado, los panistas hacen razia de los yunistas en las municipales, y por otro los morenos también.

Es el caso de lo que se ha hecho público en Atzalan donde se denuncia que los Yunes buscan infiltrar a sus familiares en la candidatura a la alcaldía a través de la marca MORENA.

Se habla en esa zona serrana que la exalcaldesa y ex diputada federal y local por el PAN Alba Leonila Méndez Herrera, busca infiltrar en las filas de MORENA a su hermano Jesús.

Pero, la historia no terminará ni empezó en Atzalan, por todos lados se escucha el mismo discurso y buscan el apoyo de la gobernadora Rocío Nahle y del dirigente estatal de MORENA para que no se permita ganar a los infiltrados ni tampoco el nepotismo.

¿Quién sigue?

Porque quizá a nivel estatal podrán pasar desapercibidos las familias y políticos-as yunistas, pero en el municipio los tienen bien identificados.

¡Ya se verá, y será tema! ¿Imagínese de qué tamaño?