NO FUE nada extraño que recientemente se viera al subsecretario de gobierno José Manuel Pozos Castro, reunirse con el Maestro Esteban Bautista Hernández, presidente de la junta de coordinación política del congreso local, para acordar varios asuntos que tienen que ver con una debida coordinación entre los dos poderes del Estado, por una mera preocupación política de la gobernadora Norma Rocío Nahle García, quien busca, de alguna manera, la institucionalidad en el ejercicio del poder público, cuyos resultados sean beneficiosos para los veracruzanos en general, pues, finalmente es el compromiso que tiene su gobierno frente al pueblo que ha depositado la confianza necesaria para que se haga de Veracruz, un estado eficiente, comprometido y facilitador de las buenas acciones que se requieren para cumplir con las necesidades que la propia ciudadanía ha venido demandando.

Lo que quiere la titular del poder ejecutivo, es que haya un trabajo conjunto, respetándose las funciones de cada poder y dentro de un marco totalmente institucional. Por eso es que el subsecretario Pozos Castro, ha puesto manos a la obra para que todos puedan ejercer sus propias funciones, pero respetándose los propios ámbitos de competencia, aunque no separados del objetivo primordial que es realizar un buen gobierno en el que todos tengan participación activa y se pueda cumplir, al pie de la letra con el único compromiso e interés que beneficie a los gobernados.

El maestro Esteban Bautista Hernández, interpreta perfectamente bien lo que quiere la gobernadora y como titular de la junta de coordinación política del congreso local, tiene el mismo objetivo, donde sus acciones van encaminadas en el mismo sendero, procurando que la entidad veracruzana, marche por el sendero de la institucionalidad y el buen gobierno, del cual, indudablemente, forma parte.

El acercamiento político entre los dos poderes, es una forma de avanzar en la solución de muchos problemas que afectan al pueblo veracruzano, cuya gobernanza tiene, necesariamente, que partir de acuerdos conjuntos entre los poderes del Estado, dentro de una sana división de competencia política y constitucional.

(DE LA COLUMNA "LÍNEA POLÍTICA")

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