Extrañamente durante casi todo el mes de septiembre, en las mesas de análisis radiofónicas locales y nacionales, reconocidos economistas autores de libros afines al rancio y voraz capitalismo, alertaron a los mexicanos acerca de la pérdida de empleos formales, adelantando una recesión que sigue sin llegar.

Curiosamente, los principales voceros de los partidos políticos de oposición no se ocupan del tema, pues esa labor la dejan a los analistas económicos y voces “autorizadas”, auspiciadas económicamente por el sector empresarial.  

Pero los registros oficiales como los que da a conocer el IMSS, en la que participa el sector privado como una de sus partes financieras, anunció que al 31 de octubre pasado se alcanzó la segunda cifra más alta de asegurados: “22 millones 639 mil 50 de trabajadores registrados: Zoé Robledo”. Es decir, los negros pronósticos no cuadran con la fortaleza de la economía mexicana. 

Del total de empleos registrados, el 87.4% -19 millones 777 mil- son permanentes y la población femenina es más de 9.1 millones de los puestos, es decir el 40.6% del total.

El salario base de cotización promedio fue de 623.5 pesos diarios - 7.4% de crecimiento anual-.

Lo más importantes es que mientras se habla de crisis y recesión, la cifra dada a conocer por Zoé Robledo es la segunda más alta desde que se inició el registro en el 1997. 

Y otro dato, para que -como dice el gran campeón mexicano “se entretengan”-, la cifra más alta se registró en noviembre de 2024. 

Ni modo, colegas y “expertos” economistas siguen dar una. 

Y por otra parte, ¿Leyó Usted algún analista que señaló puntualmente las cifras bajas de generación de empleos en meses pasados? Sería bueno ver si ahora apuntan las altas. 

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(COLUMNA "FIGURAS Y FIGURONES")