La Suprema Corte de Justicia de la Nación, que debería de ser la que custodie celosamente el respecto y se observe, con privilegio jurídico el contenido de la constitución política de los Estados Unidos mexicanos, que es producto de las revoluciones de independencia, reforma juarista y revolución con Venustiano Carranza- ante el golpe de Estado del nefasto Victoriano Huesca, ha llegado ahora a exhibirse como una institución que es el motivo de burla y sorna , que se ha ganado a pulso, por el perversidad de que quienes la integran que, con cinismo extremo se exhiben tal cual son, cretinismo que lleva a la arrogancia y prepotencia sin límites .

Con su actitud cretina, han puesto en riesgo la economía del país y querer desestabilizado por el odio interna que surgen, como es su racismo y su desprecio por la justicia, y su gran afán de tener recursos personales mal habidos, pues violentar el artículo 127 constitucional que fue reformado hace más de quince, habla mucho de su voracidad a no observarlo y eludir la responsabilidad de atender, que primero están las necesidades nacionales y luego su afán de enriquecimiento en un atraco y saqueo de las arcas públicas que rayan en la peor iniquidad que se puede dar en régimen de autoridad que no se respeta, pues por encima del bienestar de la nación se autorizan sueldos que rayan en la perversidad.

El primer acto de corrupción que se tolera y de ahí proviene todo, cuando el presidente Zedillo desaparece ese poder, que estaba constituido por 21 ministros y de la noche a la mañana se integra solo con once, sin embargo, para evitar el escándalo se les establece un haber de retiro y cientos de privilegios que ofenden a una nación democrática ,que no existía en esa forma y se amplia para que esa minoría privilegiada viva ahora en su abundancia y , bien en la reciente reforma se transforman para su elección – voto directo y secreto- dejando de lado el voto de dedo que ejercía el presidente de la república, pues era el sitio de amigos y concubinas de quien los imponía.

En la nueva reforma constitucional , propuesta por el presidente López Obrador, pues ante lo podrido de esa institución para que por si misma se reformada y darles libertad de que la austeridad jurista se viera reflejada en los hechos, no se vio esa posibilidad y se dejó el camino para que la democracia hablara y así se está llevando a cambiar las reglas, que no agradan, llegando al extremo se oponerse de manera abierta, violentando el artículo 123 constitucional y sacando a las calles a los empleados para alebrestar a la sociedad, por aquello que al poder judicial no se le toca, de manera que como factor de presión no llegar a cumplirse lo que es constitucional, aunque se respetan los derechos mal adquiridos , que da vergüenza que se repitan, pues en tanto cincuenta millones viven en la pobreza o en la miseria, una minoría se agandallan de los bienes nacionales y dictan resoluciones contrarias al interés del país, y ahí está el caso de Luis María Aguilar, ministro que ya poco hueca el ala, guardan un expediente que el atrajo para proteger al grupo Salinas por más de 29 mil millones de pesos, es decir, darle largas, de manera huizachera a un juicio que ya estaba resuelto a favor de la nación.