Siguiendo la pista a los candidatos en su empeño proselitista no se ve por ningún lado que alguno haya respetado planeación alguna de su campaña. –si es que la hicieron-. No se ha visto orden o plan. Casi todos han soslayado reunirse con profesionales del agua, finanzas, economía, medio ambiente y otros. ¿Ya lo sabrán todo? Es tan poco el tiempo de campaña que ni pensar en recorrer todos los poblados. Por ello, como viles chapulines se les ve en el norte, mañana en Córdoba y al siguiente de nuevo en el Norte. Las agendas se hicieron añicos. Mucha gente y grupos políticos se han quedado esperando al candidato. El PRD por ejemplo, se ha quedado esperando un acto multitudinario del perredismo con su candidato coaligado. Héctor Yunes, de haber hecho caso de tanto ofrecimiento en la capital y en el Puerto, los demás distritos se hubieran quedado esperando. Habrá que ver en qué termina el gran experimento electoral cuando apenas acaban de empezar las campañas y ya están preparando los cierres. |