Cierto, en el 2016 Veracruz representó la “Madre de todas las batallas”, pues de las 12 gubernaturas en disputa, representaba la de mayor votación, siendo Veracruz la 3a bolsa electoral del país. El resultado ya es de todos conocidos y después de décadas el PRI dejará el Gobierno. Sin embargo, ahora, los reflectores nacionales estarán en el Estado de México, y no sólo por su impresionante cantidad de votos, sino porque es la casa del Presidente Enrique Peña Nieto. De acuerdo a la última encuesta publicada por El Financiero, si hoy fueran las elecciones, de darse la coalición PAN-PRD, hay un cerrado escenario entre Josefina Vázquez Mota (abanderando esa coalición) y Alfredo Del Mazo (en coalición PRI-PVEM-Nueva Alianza), con la panista ligeramente arriba con 33% de las preferencias, mientras que el priista se lleva el 30%. Por su parte, Morena con Delfina Gómez está algo abajo pero con un buen número de 19%. Así, a casi un año de las elecciones, lo que se prevé es que de ninguna forma el PRI tendrá un día de campo y que en caso de perder EDOMEX, su casa, entonces ya podrían irle cantando las golondrinas al PRI para el 2018. |