La actual crisis con USA es adversa a México con actitudes, fuerzas y posiciones asimétricas entre ambos países. Desde 1914 no se daba un enfrentamiento diplomático de tal magnitud. No solo hay diferencias con Trump, sino también con su gabinete, con buena parte de su partido y con 60 millones de votantes que evidencian su odio a México. Ellos han roto lanzas y suenan sus tambores de guerra, mientras México se distingue por su pasividad y debilidad. Por más de 20 años se ha reaccionado con un absurdo modelo económico de evidentes consecuencias adversas. Pero no todo nos viene de USA sino de nuestra fragilidad política, de las políticas económicas, de las posturas de los cancilleres, del gobierno y la partidocracia que han favorecido el crecimiento sostenido de la pobreza y una secular dependencia económica. El concepto de nación y de patria ha regresado, cuando ingenua y dogmáticamente nos vendieron su inhumación. Es tiempo de cambio y es el tiempo de México. Esta fue una postal de Joan Rega, colaborador de asuntos especiales de Política al Día. |