A Renato Alarcón solo le aplaudieron Silvia Domínguez, Zaida Lladó, Aldo Zavala y otros más, y muchos pensaron que se le había olvidado a Héctor mencionarlo porque fue de los últimos en nombrar.
Anilú Ingram fue distinguida por Héctor por representar a Enrique Miranda Nava, el tigre de SEDESOL.
Ernesto Cuevas, el “Gallo Bolo”, donó 10 mil pesos para las visas de un equipo de jóvenes beisbolistas, aunque antes Fidel Kuri había ofrecido pagar visas y gastos.
Al final la gallera aplaudió hasta el delirio cuando Héctor descalificó con todo al gobierno de su primo.
Pero, lo mejor de lo mejor fue la comida en el Cacharrito, invitada por el alcalde Ramón Poo. |