Carlos Loret de Mola, un profesional del periodismo y de la economía nacido en medio de una cultura de injusticias e impunidad a la que se enfrentaron sus antepasados, abuelo, padre y tíos- trae en la sangre los genes de la justicia, de la denuncia e investigación a fondo, así como un profundo sentimiento de solidaridad con todos sus colegas, activistas y defensores de los derechos humanos; pero más con los que han caído y son víctimas de la intimidación y el acoso del Sistema, del ‘mecanismo’ de corrupción descubierto en Brasil, ese cáncer que se dispersa desde la cúpula del poder y que todo lo envuelve.
Salió de Televisa una empresa que cuida sus propios intereses más que la de aquellos que la integran, pero siguió su lucha cual ‘Llanero solitario’ donde el interés por sus escritos, comentarios e investigaciones no menguó un ápice debido a la democratización de la información que se vive en el mundo.
Tan es así que hoy el mismo Carlos anuncia la invitación que recibió del Washington Post PR, en el que le dan la bienvenida como su colaborador. ‘Su defensa a la libertad de expresión es inspiración y referencia en el mundo’ dice la invitación.
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