Curiosamente, la caída de Cuitláhuac también está aparejada a la caída en la aceptación de López Obrador, quien en diferentes encuestas ha sido consistente su decremento.
El problema es que la condición humana es natural a culpar al gobierno cuando las cosas no van bien, y si aparte de los problemas normales del Estado, dentro de muy poco tiempo se sumarán los problemas de salud y la terrible crisis económica que se prevé, entonces sí quién sabe cómo salga el gobierno de MORENA de cara a las elecciones del próximo año.
Hoy, la aceptación de Cuitláhuac está a la baja, veremos hasta dónde cae.
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