Cuitláhuac García Jiménez se exaltó al decir ve que en el discurso de un grupo de gobernadores de la oposición un movimiento 'separatista', que los ve como a una ‘agrupación golpista’. Lo dijo con vehemencia y hasta tomó una pausa para sopesar sus dichos, como midiendo el resultado de sus palabras aunque la dialéctica, al parecer, no se le da.
AMLO no lo ve así. El Presidente AMLO difiere de lo que piensa el Gobernador Cuitláhuac y se lo hizo saber.
Pudiera Usted pensar, ¿Qué con eso? Los sabios bebedores de café piensan que la costumbre y la ortodoxia marcan la importancia. ¡Eso no debió haber sucedido!
Pero las cosas han cambiado.
Antes, a pesar de la molestia por el avasallamiento del Poder Central, los que llegaban como ‘avanzada’ revisaban letra por letra lo que iban a decir los oradores frente al Presidente, así se tratara de un gobernador. Pero nadie se quejaba por ello pues servía precisamente para que Federación y Estado no se enemistaran. Eran “formas”, duras formas… pero servían.
Se hablaba de pluralidad sin tener ni tantita idea de lo que ello significaba o peor, se era incapaz de practicarla.
Ahora, el Presidente y el Gobernador difirieron al expresar sus ideas, y todo mundo se espanta.
Algún día se entenderá que en la esencia de la democracia, como en cualquier familia decente, las diferencias existen y pueden ser sanas.
Eso pasará algún día, porque hoy, a fuerza de costumbre, los sabios bebedores de café vieron cómo medio mundo se infartó. Y tal vez no es por la diferencia ideológica, sino por observar como una y otra vez, Cuitláhuac demuestra que en eso de tener tacto político, aún le falta mucho, muchísimo tramo.
Canillazos para los que no entienden que las cosas han cambiado y lecheros para Cuitláhuac, para que agarre fuerzas y siga esforzándose. |