Y es que a Jesús Seade lo cacharon en la maroma y le descubrieron que viajó en cinco ocasiones a Hong Kong, en donde tiene familiares, y todos esos viajes fueron cargados al erario público. ¡Claro! El viajecito en clase premier, porque aunque AMLO se niegue a utilizar el avión presidencial y utilice solo líneas aéreas comerciales en clase turista, al señor Seade Kuri eso no le bastó y viajó en clase fifí. ¿Los viáticos? Por supuesto que también fueron cargados al erario público, total, si ya iba a hacer la chacalada pues había que hacerla bien.
Y es que al momento en la Secretaría de la Función Pública existen pruebas documentales y oficios de comisión de la propia Secretaría de Relaciones Exteriores, en los que se sustentan las acusaciones de que habría gastado casi 1 millón de pesos del erario de forma irregular, pues de sus visitas a Hong Kong no se comprobó que haya realizado actividades oficiales.
Al respecto, como siempre ha pasado cuando las denuncias son contra sus propios colaboradores, Andrés Manuel López Obrador dijo esta mañana que no tenía conocimiento del caso ni de las investigaciones en Función Pública contra el subsecretario para América del Norte.
Así que el señor sabe todo lo que hay que saber en el Gobierno (así lo afirmó anteriormente, que en un gobierno nada sucede sin que el presidente lo sepa), todo, menos lo que sus colaboradores hacen.
Por lo pronto, Jesús Seade Kuri cuando menos debería ser investigado por peculado y abuso de funciones, a menos que la intención sea echarle tierra al asunto. |