Las bondades y beneficios de la reestructuración ya fueron ampliamente explicados a los alcaldes de todas las regiones y ya se les explicó que podrían liberar alrededor del 30% del pago que actualmente realizan y que podrían utilizar esos recursos en otras áreas que ellos mismos requieran.
¡Imagínese! Pagar 30% menos de lo que actualmente se paga en una deuda que a estas alturas se ve impagable si no se reestructura. ¿Dónde se firma? Para firmar de una buena vez.
El problema es que así como se entró a la Bursatilización (en paquete), así también se tendrá que entrar a la reestructuración, pues sería muy complicado acceder a los beneficios si sólo son algunos -y no todos- los ayuntamientos con la deuda los que le entran.
Por eso que el propio gobernador Cuitláhuac García convocó nuevamente a los cabildos a reestructurar la deuda impagable de los municipios.
Oportunidades como ésta no se presentan a cada rato. Actualmente se deben cerca de 1,400 millones de pesos y esta deuda se viene arrastrando desde el 2008.
Doce años después la perspectiva es la misma y los ayuntamientos sufren para pagar ese ominoso préstamo.
|