Con enjundia, levantaba la voz cada vez que repetía alguno de los argumentos que utiliza la oposición para justificar su voto en contra:
- “Se ha dicho que la reforma es en contra del medio ambiente: falso”.
- “Que se viola el tratado con Estados Unidos y Canadá: falso”.
Y al hacer una remembranza de la reforma eléctrica del 2013 que inició el presidente Enrique Peña Nieto y aprobaron los partidos del PRI, PAN y PRD, “casi provocó la "destrucción" de la CFE.
Afirmó que esa reforma se utilizó para que fluyeran contratos leoninos e ilegales con extranjeros y aseguró que mientras en los hogares mexicanos se paga un precio elevado, los Oxxo pagan menos y todo subsidiado por el pueblo de México.
La reforma de 2013 impidió que CFE e hidroeléctricas pudieran generar energía, incluso a costa de inundar el sureste y puso como ejemplo la tremenda y dramática inundación de Villahermosa.
La jefa de Gobierno capitalino también aprovechó la ocasión para hablar del ejercicio de revocación de mandato: “aunque se molesten los consejeros del INE, porque no podemos olvidar que el desmantelamiento de la industria eléctrica se dio con el autoritarismo de gobiernos protegidos por ellos”.
¡Que viva la democracia! Arengó a los asistentes Claudia Sheinbaum.
Y terminó afirmando que “ningún presidente a partir de ahora, podrá ignorar la voluntad de su pueblo, porque sabe que a los tres años tendrá que enfrentar la revocación de mandato".
De igual forma, a AMLO "no lo vencerán las calumnias”.
"El presidente Andrés Manuel López Obrador no está solo", remató su intervención.
No cabe duda que Claudia Sheinbaum supo esta tarde aprovechar la circunstancia que se le puso enfrente, pues en pocas palabras aprovechó la esencia de la necesidad de reformar la ley eléctrica para enviar un mensaje político a la oposición, que quizá no se de cuenta aún, de que con su rechazo a la reforma están sellando su derrota en las urnas en el 2024. |