El director del Instituto Veracruzano de Educación para los Adultos IVEA, Héctor Leonel Amezcua Cardiel, o al menos Moisés Pérez Domínguez, Subsecretario de Desarrollo Educativo y representante de la SEV en la Junta de Gobierno del IVEA, deberían rendir cuentas e informar al titular de Educación de Veracruz, Zenyazen Escobar García y sobre todo al gobernador Cuitláhuac García Jiménez por ser un organismo federal coordinado, pues dicho Instituto no aplicó la totalidad de los recursos que llegaron del Fondo de Aportaciones para la Educación Tecnológica y de los Adultos y se tuvo que devolver 15 millones de pesos a la Tesorería de la Federación por falta de aplicación.
Pero eso no fue todo el chistecito, ya que aunado a los 15 millones de pesos que tuvo que reintegrar a la Tesorería de la Federación, la ASF detectó un probable daño a la Hacienda Pública Federal por 2 millones 890 mil 300 pesos que se tendrán que solventar en su momento ante la ASF.
Lo anterior no es un invento ni ganas de molestar, sino que esa información corresponde al Informe de la Cuenta Pública 2021, que la Auditoría Superior de la Federación entregó a la Cámara de Diputados.
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Así se hizo ver al Gobierno del Estado de Veracruz como incumplido de sus obligaciones de transparencia sobre la gestión del Fondo, ya que no reportó con calidad y congruencia, a la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, la información remitida en el cuarto trimestre del formato Ejercicio del Gasto.
Si bien no es muy profesional ni buenos oficios devolver un sólo peso a la federación, lo peor es que algunos pesos hayan sido mal aplicados, es importante que Zenyazen aplique las sanciones correspondientes y haga que el responsable asuma su responsabilidad antes de que a él le achaquen las faltas, sobre todo ahora que como se ha visto anda queriendo ser el candidato de MORENA a la gubernatura.
En política más vale prevenir que lamentar.
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