Aquí en Veracruz, por ejemplo, la opinión de algunos panistas es que Santiago Creel lo que hace con sus declaraciones es atacar y de frente a los demás azules que también aspiran para el 24, pero también le cierra la puerta a cualquier aspirante que desde las filas de la Sociedad Civil están bajo la lupa de las cúpulas de la derecha para encabezar la Alianza Va por México.
Al decir, aseguran, ser el único que ‘no tiene cola que le pisen’ está diciendo que los demás sí, lo que no se duda ni tantito de los aspirantes de su propio partido ni de los del PRI y PRD que pudieran servir, pero atajar con esa premisa a los de la Sociedad Civil es tanto como ponerle una soga al cuello a la propia Alianza, quien desde ahora se ve que de no ser encabezada por alguien apartidista, ciudadano y conocido entre la sociedad civil no tendrán ninguna oportunidad de arrebatarle el poder a MORENA.
Lo que quizá Santiago Creel debiera hacer es sacar cuentas y recordar que bajo la confianza del PAN y de los expresidentes Vicente Fox y Felipe Calderón, desde los sitios de privilegio que ostentó, solapó las relaciones de su compañero de gabinete Genaro García Luna.
Quizá por ahí, y sin rascarle mucho, podría ser señalado por lo menos de cómplice con lo que hoy está sufriendo el país. |