El origen de la investigación que podría suponer al expresidente su cuarta imputación penal parte de una llamada telefónica hecha el 2 de enero de 2021 al secretario de Estado de Georgia, Brad Raffensperger, en la que el empresario lo instó a “encontrar 11 mil 780 votos”. Número de sufragios representaba exactamente los que el expresidente Trump necesitaba para ganar la elección en ese estado y que sería clave para el resultado a nivel nacional.
La situación de Trump se le complica y poco a poco se le ve más cercano el día en que podría ir a la cárcel ya que la reciente imputación se agrega a la que se le declaró el pasado 1 de agosto por un gran jurado en Washington DC sobre el asalto al Capitolio en el 2021. Esta imputación fue por las siguientes conspiraciones: Para defraudar a Estados Unidos; para obstruir un procedimiento oficial; un procedimiento oficial y otra contra el derecho al voto.
Además, en Nueva York fue imputado con 34 cargos por supuestos pagos irregulares a la actriz porno Stormy Daniels para comprar su silencio durante la campaña electoral de 2016.
Todo lo anterior sin contar con que en Florida enfrenta otra causa penal por 40 cargos por sustraer ilegalmente y mantener en su mansión de Mar-a-Lago documentos clasificados que sacó de la Casa Blanca tras abandonar el poder.
Definitivamente a Donald Trump le esperan días negros ya que poco a poco se le ha ido quitando esa sonrisa bravucona que lo caracteriza.
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