La reunión que sostuvieron ayer 95 alcaldes, la mayoría del PRI, con el gobernador interino, Flavino Ríos Alvarado, no generó ningún acuerdo beneficioso para los ciudadanos, afirmó el alcalde de Boca del Río, Miguel Ángel Yunes Márquez.
Así, el edil criticó que los alcaldes del PRI y otras fuerzas políticas aliadas no se sumen a la toma del Palacio de Gobierno para exigir el pago de sus participaciones federales.
“A mí me dio mucha vergüenza ver a los alcaldes priistas ir a doblar las manos y aplaudirle a Flavino, ahí están las imágenes de Américo aplaudiéndole a Flavino, la verdad es una vergüenza”, consideró Yunes Márquez.
Hay que recordar ayer lunes en la reunión de Ríos Alvarado con los 95 ediles, la mayoría del PRI, se estableció que habrá un pago próximo para este 3 de noviembre para los municipios con recursos del Fondo de Aportaciones para la Infraestructura Social y Municipal (FISM) y del Fondo de Aportaciones para el Fortalecimiento de los Municipios (FORTAMUN).
Además, se planteó la necesidad de la intervención de un representante de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), así como un mediador que negocie con el Gobernador en turno y el electo en el tema de los adeudos de recursos federales a los municipios.
Insistió en que sus homólogos de otros ayuntamientos aceptaron un acuerdo que no les beneficia en nada, ya que solo les van a depositar un mes de lo que les deben cuando hay aplazamientos desde hace más de cinco meses.
“Esa reunión fue una estrategia para tratar de difuminar lo que estamos haciendo aquí en palacio de gobierno, pero la realidad es muy distinta a lo que estamos planteando”, consideró el alcalde de Boca del Río.
En ese sentido el munícipe agregó que cualquier alcalde del tricolor que se quiera sumar a la toma del palacio será recibido, ya que se tiene que exigir un alto total a los abusos y robos durante el sexenio de Javier Duarte.
Tras cuatro noches de pernoctar en el Palacio de Gobierno desde el viernes pasado, Yunes Márquez lamentó que Ríos Alvarado los haya ignorado y argumente que no puede acudir al inmueble porque no hay condiciones de seguridad.
No obstante negó que vayan a aceptar una reunión con él en otro lugar, pues es una mentira que pueda estar en peligro el gobernador interino.
“No somos sus empleados para que nos ordene ir a Casa Veracruz ni a ningún otro lado, él es empleado de los veracruzanos y debería tener la valentía de enfrentar las cosas como hombre, no como un cobarde.
“Aquí no hay delincuentes, hay ciudadanos, mujeres y hombres libres que no han hecho más que exigir que se cumplan las promesas que se hicieron y que el recurso de los veracruzanos se entregue”, agregó.
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