Unas 7 millones de mujeres mexicanas cumplen con una doble jornada al desempeñarse laboralmente y atender a sus familias, lo que representa un 25 por ciento del total de hogares en el país, señaló Patricia Espinosa Torres, representante en México de la Cumbre Mundial de Mujeres.
De visita en el puerto de Veracruz, la activista por los derechos humanos de las mujeres dijo que el respeto a la investidura de las amas de casa y jefas de familia se verá reconocida una vez que las empresas, sociedad y gobierno doten de mejores salarios y prestaciones sociales a este amplio sector.
“Estamos hablando que son más de 7 millones de mujeres que deben llevar el ingreso a casa y sacar adelante a sus hijos. Si estimamos que hay 28 millones de hogares a nivel nacional, estamos hablando que representan una cuarta parte de la contribución económica”, indicó.
Espinosa Torres, quien en el 2001 se convirtió en la primera presidenta del Instituto Nacional de las Mujeres, manifestó que al menos del 70 por ciento del trabajo que realizan las mujeres mexicanas es no remunerado.
“La carga que existe sobre este grupo es muy grande, por ello creo que el compromiso para con ellas debe ser de igual forma, de manera que las empresas y el gobierno ofrezcan mejores prestaciones sociales, horarios flexibles y existan incentivos para su crecimiento profesional y personal”, comentó.
La también exdiputada por Querétaro celebró que haya avances en el reconocimiento del papel de la mujer, sin embargo, sostuvo que aún faltan garantías para su desarrollo laboral y el respeto a su integridad.
“El hecho de que tengan derecho a la reproducción no significa que obligadamente se queden en casa. Creo que se ha ido avanzando en los acuerdos entre parejas y en que el modelo social también ha evolucionado, pero requerimos de más oportunidades”, mencionó.
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