En el primer bimestre del 2017 cerraron 10 restaurantes en la zona conurbada Veracruz-Boca del Río, lo que representó la pérdida de por lo menos 50 empleos, informó el presidente de Cámara Nacional de la Industria Restaurantera y Alimentos Condimentados en Veracruz, Daniel Martín Lois.
El incremento en el costo de los insumos genera que los negocios de reciente creación no tengan la experiencia para soportar la crisis y se vean obligados a cerrar, explicó el empresario veracruzano.
“Es obviamente una preocupación mayor porque si son diez de nuestros agremiados pues pueden ser muchos más de los que no son agremiados. La situación viene y es preocupante porque es debido al incremento de los insumos, porque cuando suben las tarifas de luz, suben las tarifas de gasolina y demás pues es directamente proporcional a la distribución de nuestros insumos de primera necesidad”, explicó Martín Lois.
El presidente de la Canirac Veracruz respondió que en cada uno de los restaurantes que cerraron pueden trabajar entre cinco y diez personas, por lo que la pérdida de empleos podría oscilar entre 50 y 100 plazas laborales.
Los restaurantes más vulnerables ante situaciones económicas complicadas son los de reciente creación y por ello los negocios que cerraron tenían entre uno y dos años en el mercado.
Los empresarios del sector restaurantero tomaron la decisión de fortalecer el mercado interno en la adquisición de sus insumos, además de desarrollar proyectos que atraigan consumidores.
Martín Lois indicó que el Consejo de Canirac determinó la organización de un proyecto cada bimestre para la recuperación del rubro en la zona conurbada Veracruz- Boca del Río.
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