Si antes era el Rey Midas del Pop que a cada álbum por lo menos lo hacía Disco de Oro, sumaba hits y facturaba millones, de unos años para acá Luis Miguel ya no es una máquina de hacer dinero pero sí de acumular demandas, y ahora su propia empresa discográfica Warner Music México emprendió una querella legal en su contra por una supuesta deuda superior a los 3 millones de dólares. Según difundió el programa Suelta la Sopa, de la cadena hispana Telemundo, el cantante de 46 años acordó reembolsarle a la compañía 3 millones 650 mil dólares en 2014, sin revelarse los motivos de este adeudo, y ahora el caso ya se habría turnado a una Corte de Los Ángeles. De acuerdo a documentos que argumenta tener la emisión televisiva estadunidense, el año pasado Luis Miguel renegoció la fecha en la que devolvería tal cantidad, bajo una confesión firmada ante un tribunal en Nueva York, donde manifiesta estar al tanto de esta deuda. Tras su paso por la compañía EMI Music México, Luis Miguel Gallego Basteri firmó en 1987 como artista exclusivo de WEA Latina, sello propiedad de Warner Music México, con su noveno disco Soy como quiero ser. Desde entonces con esta empresa ha lanzado 21 álbumes, con ventas nunca menores a un millón de unidades por cada obra musical. Actualmente El Sol, como también se le conoce al intérprete suma otros dos recientes demandas en su contra por incumplimiento de contratos, una con su colega Alejandro Fernández El Potrillo y la otra con su ex mánager William Brockhaus. Sin embrago ya antes venía arrastrando otras disputas legales, tales como una por rentas retrasada de una propiedad, otras del paparazzo Tony Echeverría y una más de una empresa de remodelación de interiores a la que le debe 100 mil dólares por unas adecuaciones en una de sus propiedades.
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