Aseguró que una de las metas de este año es crear conciencia de la existencia de pacientes que requieren transfusiones regulares de por vida, por lo que es importante el papel que tiene el donador para obtener sangre y plasma.
Subrayó que todo aquel que esté interesado en donar sangre de manera voluntaria deberá presentarse en los días y horarios antes señalados, con ayuno mínimo de 8 horas, tener entre 18 y 64 años (con identificación oficial), tener un peso mayor a 50 kilogramos y medir más de 1.50 metros.
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Asimismo, tener en términos generales buena salud; no padecer diabetes, hipertensión, hepatitis ni infecciones como gripe, herpes o diarrea; no haber ingerido bebidas alcohólicas por lo menos 48 horas antes de la cita.
No haberse realizado tatuaje, perforación o acupuntura en los últimos doce meses; no ingerir medicamentos para próstata, aspirina o antibióticos; mujeres no estar embarazadas y no haber sido transfundido el donador o su pareja en los últimos 12 meses.
Las transfusiones de sangre y sus productos ayudan a salvar millones de vidas en el mundo y contribuyen a que pacientes con enfermedades potencialmente mortales vivan más tiempo con mejor calidad de vida, también posibilitan la realización de intervenciones médicas y quirúrgicas complejas.
Los servicios que permiten a los pacientes acceder a sangre y productos sanguíneos seguros en cantidades suficientes son clave para los sistemas de salud. Solo se puede asegurar un suministro suficiente mediante donaciones regulares voluntarias y no remuneradas.
Por último, manifestó que las donaciones sanguíneas se realizarán bajo los protocolos de seguridad y cuidados apropiados a fin de garantizar la protección de las y los pacientes, así como del personal de la institución.
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