Los litos pueden estar formados de diferentes sustancias como: oxalatos de calcio, ácido úrico, antioxidantes, fosfato, amonio, magnesio y un paciente puede presentar varios tipos.
El síntoma más común es la presencia de dolor persistente en la espalda baja, este puede presentar picos muy altos de dolor y disminuir de un momento a otro.
Pérez Ruíz comentó “en muchas ocasiones con tratamiento y bebiendo abundante agua el paciente puede expulsar las piedras, sin necesidad de intervención quirúrgica; sin embargo, es importante saber que es un proceso lento y se debe de tener paciencia.”
Para prevenir este padecimiento es importante tener un buen hábito de tomar agua natural y consumir al menos 2 litros al día y disminuir el consumo de sustancias pesadas como el café.
La especialista recomendó presentarse en el área de Urgencias al momento de sentir el dolor y evitar el automedicarse; asimismo, recordó que el IMSS cuenta con especialistas para la detección oportuna de dichos cálculos para un adecuado tratamiento. |