Andrés Manuel no dedicó más tiempo al tema. No es un asunto que le resulte cómodo y, por lo tanto, lo más sencillo es turnar a “la prensa conservadora” a que se entiendan con Jesús… Ramírez.
El vocero tampoco se siente cómodo con ese asunto y optó por buscar una fuente “amable” que se encargara de difundir la versión del gobierno federal. Para eso está la agencia oficial de noticias, Notimex.
Jesús Ramírez dijo poco, pero lo que mencionó fue revelador.
De entrada adelantó que la primera línea de investigación sobre el ataque a la periodista, va en el sentido de que los autores están vinculados con el crimen organizado. Sin embargo, el vocero presidencial llamó la atención sobre la cobertura que venía haciendo María Elena Ferral sobre “otros crímenes políticos y de personas en la región, que ha sido asolada por la violencia”.
Dijo el servidor público que desde el primer momento en que se conoció el ataque a la periodista se dispuso lo necesario para que recibiera atención médica y la Secretaría de Gobernación -a través del área de Derechos Humanos y el de protección a periodistas- tomó las medidas pertinentes para salvaguardar a su familia, “particularmente a su hija, que pidió protección”.
Al detallar el apoyo a la familia de la periodista, Jesús Ramírez mostró la línea de acción que han tomado las autoridades para dar con los responsables:
“Actualmente recibe y está protegida (la hija de la víctima) tanto por Seguridad Pública del estado de Veracruz, como por la Secretaría de la Defensa Nacional, por el tipo de delito que está asociado, porque tenemos información, del crimen organizado”.
¿Son dos líneas de investigación, o es una sola?
¿El ataque fue decidido y operado desde las bandas de la delincuencia organizada porque la periodista “se acercó demasiado” al origen de otros crímenes?
¿O el crimen tuvo una motivación política, pero fue encargado a alguna organización criminal de la zona?
A través de su cuenta de Twitter, el gobernador Cuitláhuac García anunció, a unas horas de que se confirmara la muerte de la periodista, que “ya existen líneas de investigación claras y avances”.
Hace un par de meses, el 10 de febrero, el gobernador dijo algo parecido, en referencia al asesinato del diputado priista Juan Carlos Molina Palacios, ocurrido el nueve de noviembre del año pasado.
“Ya tenemos avanzados varios casos así, pendientes de justicia como es el caso del Diputado que falleció, que fue asesinado, tenemos avances sustanciales, lo revisamos, ya muy concretos”, informó en esa ocasión.
Dos meses después, dichos avances siguen sin materializarse.
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