No sólo eso: Al detenido le dieron la categoría de “asesino serial”, pues aseguran que con el mismo modus operandi (ofrecer empleo por redes sociales, citar a la víctima y desaparecerla) habría realizado otros crímenes similares.
Pero la mañana del viernes, Enrique Moreno y Aurora Vázquez, padres de Viridiana Moreno, aclararon que ellos no están convencidos de la muerte de su hija, pues los retos humanos que les presentaron no mostraban rasgos que ellos conocían de Viridiana y con los que podrían identificarla:
“Ella tiene en el brazo un tatuaje con el nombre de su hijo y un corazón, lo que no aparece en el cuerpo que nos presentaron; tiene una cicatriz de cesárea, y el cuerpo que nos mostraron no la tenía; tiene una cicatriz vieja en el hombro, de una vacuna; tampoco estaba esa parte del cuerpo; tiene una cicatriz, en la nuca, pero nos dieron una cabeza que no tiene esa parte, y nos dijeron que sacaron muestras de unos brackets que ella usaba, pero ella los dejó de usar desde hace más de tres años”, explicó la señora Aurora Vázquez, madre de la joven desaparecida.
A la conferencia de prensa, los padres de Viridiana llegaron debidamente asesorados. A su lado estaba el abogado penalista Tomás Mundo Arriasa, pero también estaba presente (viajó toda la noche para llegar a tiempo) la Presidenta Nacional de la Red de Mujeres Defensoras de la Paridad en Todo, Josefina Meza Espinoza.
¿De dónde salieron los recursos para pagar el salón donde se ofreció la conferencia y contratar los servicios del abogado?
¿Qué papel juega Elizabeth Morales –exalcaldesa de Xalapa- en este caso?
Eso era lo que más les preocupaba a algunos de los reporteros presentes (enviados -se supo ahí mismo- por funcionarios del gobierno estatal). Se les explicó que Elizabeth Morales forma parte de la Red de Mujeres Defensoras de la Paridad en Todo, capítulo Veracruz, y que los gastos se estaban sufragando con la aportación de muchas mujeres y familias veracruzanas.
El abogado Tomás Mundo Arriasa anunció las medidas que habrán de tomar para, en primer lugar, tener la certeza de que el cuerpo presentado por la Fiscalía corresponde realmente a la joven desaparecida y que se están siguiendo los protocolos que marca la Ley para brindar justicia a la familia afectada.
“Se pedirá que se practique en un laboratorio de la Ciudad de México, un cruce del ADN de los padres y de las partes del cuerpo que mostraron; se pedirá una prueba de antropología forense, para determinar si esos restos son los de Viridiana, y en virtud de que, según la Fiscalía, se trata de un “asesino serial”, se pedirá que obren en la Carpeta de Investigación las pruebas científicas a las que hizo referencia la titular de la Fiscalía, para acreditar la Neurobiología del Asesino. Estas pruebas deben incluir Resonancia Magnética o Tomografía computarizada, que evidencie alteraciones estructurales, acompañadas de una evaluación neuropsicológica”, dijo el abogado.
Otro tema fundamental, advirtió Tomás Mundo, es que la Fiscalía debe responder a esta interrogante: Si se trata de un “asesino serial”, es natural que presente problemas mentales, por lo que sería inimputable (esto es, que en el momento de ejecutar la conducta antijurídica no tuvo la capacidad de comprender su ilicitud) y, por lo tanto, si es inimputable entonces debe estar en un Centro Psiquiátrico, no en la cárcel. ¿Por qué razón le dictaron un año de prisión preventiva?
Las prisas de la Fiscalía y del gobierno estatal por dar como concluido este asunto, en el que se cometió una pifia que debería tener repercusiones penales, ha provocado que se genere una cadena de errores que dejan en peor situación al órgano -supuestamente autónomo- encargado de la procuración de justicia.
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(DE LA COLUMNA "PUNTO DE VISTA") |