Vaya, que no es precisamente un tema de voluntad el que bajen las tarifas eléctricas en Veracruz, pero sí se podría ver cuando menos el interés.
No son pocos los políticos veracruzanos que han intentado y alzado la voz en los Congresos y ante la CFE, buscando precisamente un trato para Veracruz similar al de Tabasco.
Héctor Yunes, Anilú Ingram, Pepe Yunes, Ricardo Ahued, Indira Rosales San Román, por mencionar solo algunos y más recientes, se han parado en los atriles de las Cámaras o se han sentado con los titulares de la CFE y la SENER sin éxito alguno.
Y sí, Rocío Nahle podría incluso decir que no depende de ella, que no es un tema técnicamente factible, que son políticas públicas, que la CFE no quiere o cualquier otro pretexto, pero eso sí, lo que no se vale es que no alce la voz en favor de los que -se sabe- pretende gobernar.
Si ahora que está en un puesto de privilegio y que la política energética depende de ella, no hace nada por bajar las tarifas eléctricas de Veracruz, ¿Qué se espera de ella si es que gobierna en Veracruz?
¿Con qué cara podrá presentarse a zonas calientes del Estado (que son muchas) a prometer y prometer apoyos, obras y acciones, si por su paso por la SENER no ha tenido acciones específicas en favor de sus “paisanos”? Porque la Refinería de Dos Bocas está en Tabasco y el que haya habido plazas laborales para Veracruz fue algo completamente circunstancial y no fue una política pública.
Eso sí, tampoco nos dejemos engañar, priistas y panistas también pasaron ya por puestos de privilegio y tampoco han hecho nada para que bajen las tarifas eléctricas en Veracruz, y solo han alzado la voz cuando ya no son gobierno. Cuando el PAN de Julen Rementería estuvo en el poder, a él no se le escuchó tampoco exigir a su gobierno lo que ahora exige.
No nos engañemos señor Rementería, el tema de las tarifas eléctricas es un tema político. No nos engañemos doña Rocío, si Usted quisiera cuando menos podría darles a los veracruzanos la cara y la explicación de por qué seguimos con esas tarifas.
Así que esta vez Julen Rementería se lleva una media palomita, pero no porque se le crea algo su amor por Veracruz, sino cuando menos por visibilizar la apatía de las autoridades.
Canillazos duros para Julen Rementería y para doña Rocío Nahle, porque tanto peca el que mata la vaca como el que le agarra la pata. | 
