Citlalli es del Puerto de Veracruz, asentada en el municipio de Boca del Río y ahora exempleada de Aduanas. Una mujer surgida de la cultura del esfuerzo, militante de izquierda, que hizo sus primeros estudios en Boca del Río y la carrera de abogada en la Universidad Veracruzana. Hizo maestría en Seguridad Nacional y en Ciencias Políticas y Gestión Pública. Además de su anterior trabajo en aduanas es catedrática.
Pero Citlalli Navarro destaca por ser a todas luces una persona lista, entrona, progresista, feminista y activista defensora del medio ambiente.
La pregunta es, con todos esos atributos ¿Dónde tenía guardado el PT a tan preciado tesoro?
Durante la sesión de preguntas y respuestas en la reunión con la ACOVER, fue calada con fuertes pero respetuosos bombazos y a cada uno respondió de igual manera. No se arredró ante ninguna de las puntillosas preguntas.
De las más socorridas preguntas fue cómo una persona tan preparada se prestaba al tango de ir a una encuesta que sabe no ganará, y su respuesta fue que nadie sabe lo que pueda pasar en adelante, “defendí mi derecho a participar y lo gané y nadie me quitará el derecho a levantar la voz y la mano, para darle a Veracruz mi experiencia y mis ganas de mejorar el modo de hacer llegar a Veracruz la transformación tal y como se está haciendo en el país. No estoy de acuerdo cómo se están haciendo las cosas en Veracruz, y pienso que puedo recomponer el rumbo”.
Se le cuestionó fuertemente por inclinarse ante militares contra los que antes no estuvo de acuerdo, luego de que ella dijo que le pidió permiso a su jefe (un general) para venir a Veracruz a participar en la encuesta por la candidatura en la coalición con MORENA. La respuesta fue clara, ‘porque hay que respetar a los superiores y porque los militares eran mis compañeros de trabajo’. A los asistentes periodistas no les gustó la posición de Citlalli, pero ella respondió con firmeza y eso es digno de recuperar.
Tampoco gustó el no haber respondido por qué había sido excluida inicialmente de la encuesta, a lo que respondió de una manera un tanto ingenua que a nadie convenció. Quizá pensó que estaba sentada ante un crédulo auditorio.
Finalmente, y como conclusión, Citlalli Navarro tuvo un encuentro ríspido, pero no descontrolado. Es brillante sin duda, pero demostró que en cuanto a tablas políticas todavía le falta un poco, así como de no tener demasiados recursos para el debate. Asegura conocer bien Veracruz, pero eso sí, de las demás corcholatas que van a la encuesta es la única que quizá le atinó al modo de entrar en contacto con los veracruzanos, es decir, con solo 15 días que tienen para acercarse a la gente y participar en la encuesta, lo mejor es hacer el contacto por aire y no por tierra como otros lo hacen. Son muy pocos días, pero los dedicará a darse a conocer por medios impresos, electrónicos, redes sociales, por radio y quizá por televisión.
Al menos eso comentó en corto para el autor de Figuras y Figurones.
Que haya suerte, y aunque sus oportunidades de ganar la encuesta no son las mejores, podría ser esta una excelente experiencia para ella, convertirse pronto en toda una Figura de la Política en Veracruz y ser el inicio de un camino en el que puede llegar a volar muy alto, porque la verdad, la pregunta inicial es válida: ¿Dónde tenía guardado el PT a ese diamante?
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