Es normal confundir satisfacción ante la vida con felicidad; “la primera es un juicio general acerca de la vida que proviene de la valoración, mientras que la segunda es una emoción, un estado de ánimo o un sentimiento”. Pareciera ser una constante que los países pobres estén muy insatisfechos con sus vidas, mientras que en los países ricos la gente tiene altos ingresos y evalúa su vida de una forma muy elevada. Aquí en México ¿Cómo cree que estamos? Porque evidentemente no somos un país rico, estamos dentro de los países pobres. Curiosamente no somos mucho más ricos por persona que China, y somos más pobres que Rusia, y por mucho, más pobres que Japón o Alemania. Sin embargo, tenemos un mayor nivel de Satisfacción ante la vida. En una escala del 1 al 10, estamos apenas por debajo del 7, mientras que Estados Unidos anda por el 7.5, y Dinamarca -país con mejor calificación- no llega ni al 8. ¿Realmente estamos satisfechos con nuestra vida en México? Lo anterior es parte de lo que establece el premio Nobel de Economía, Angus Deaton. |