“El pinche Renato en el ISSSTE era un pan, y en el PRI se le subieron los humos”… ¡No puede ser distinto! En el ISSSTE era funcionario público y de servicio y en el PRI tiene que lidiar con 212 municipios y miles de políticos divos que a últimas cualquiera los mandaría a la fregada.
“El pinche Renato perdió Veracruz”… ¡Dense de santos que sumaron más de 600 mil votos!
“El pinche Renato no paga sueldos”… ¿Cómo hacerlo si el partido tiene una multa de 13 millones de pesos y les recortaron 2 millones de pesos mensuales? Ni que él hubiera sido el causante, la multa es por el proceso y los excesos del 2016.
“El pinche Renato quiere una plurinominal”… ¡Pues claro! Si se postulara por Xalapa de los 212 ayuntamientos vendrían y se cambiarían de dirección tan solo para romperle el hocico.
“El pinche Renato se dejó imponer a Lillian Zepahua”… ¡Pero las que ahora lloran no dijeron nada antes! Cuando Regina Vázquez se la pasó más de un año sin ir a sus oficinas y operando en contra se quedaron calladitas las priistas. Ahora vieron hueso y se les antojó viaje, pero el pinche Renato se dejó sobajar y pisoteó sus aspiraciones. ¡Por favor señoras! Sean serias. La posición de Lillian Zepahua es posición de los 16 diputados federales, Renato ni tocó baranda como no lo hubiera hecho ningún líder priista que siempre se tiene que atener a las órdenes del Gobernador, y como ahora no hay capitán, el marinero tiene que obedecer lo que diga el CEN del PRI.
“El pinche Renato sigue emperrado en su puesto”… ¡Pero si lo que él quisiera es terminar medianamente bien su encargo! El 23 de enero les dirá que ahí tienen su pinche arpa y pueden hacer con ella un papalote. Desde que llegó al puesto lo han zopiloteado más que moscas al pan de muerto. En julio llegaba Américo, en agosto llegaba el Tiburón Kuri, en septiembre lo dejaron descansar y en octubre no saben a quién más candidatear pero nada más falta que le digan “ya vete desgraciado”.
“El pinche Renato no hace nada, no coordina y no aprende a ser oposición”… como si no supiéramos que en los partidos de la selección mexicana siempre hay 100 millones de directores técnicos más fregones.
Total, que el 23 de enero del 2018 el pinche Renato va a dejar la dirigencia del PRI, y llegará alguien más a suplirlo para, ahora sí, hacer grande al partido, hacerlo triunfar, darle un millón y medio de votos, dialogar con todos, recuperar la confianza perdida, pagarle a todos los empleados y pagarle a todo mundo, a lograr que la ciudadanía olvide los latrocinios de Duarte y compañía, y a dejar en el olvido al pinche Renato. Total, lograr todo eso está refácil, y es increíble que no lo haya podido hacer el pinche Renato. |