Y es que resulta que son los mismos cabadenses quienes desconocen en su totalidad en que fueron a parar los más de $60 millones de pesos que tuvo “El Gallo” como presupuesto anual, ya que la mayoría de obras que entregó correspondieron a fondos federales de Sedatu, Conagua, Prospera o Sedesol, siempre hizo caravana “con sombrero ajeno”.
Pero eso sí, según lo dicho por sus mismos paisanos, el ex munícipe se dio el lujo de realizar la compra-venta de un terreno de 60 hectáreas en el predio que se le conoce como “Cerro-Prieto”, entre otras propiedades más.
El problema legal en el que estará metido “El Gallo” no será menor y tendrá que responder urgentemente a estas acusaciones, ya que al igual que su compañero de partido (y ahora de dolor) Manuel Rosendo Pelayo, aun a pesar de ser investigados penalmente, intentan buscar el fuero, pretendiendo ser candidatos a la diputación local y federal respectivamente, por el Revolucionario Institucional y el Partido Verde Ecologista de México.
Vaya par de pillos.
Por otra parte, y ya que hablamos de Chendo Pelayo, nos informan que este personaje para nada se salvará del brazo de ley, pues la Comisión de Vigilancia del Congreso del Estado envío diversas quejas ante el Órgano de Fiscalización Superior por irregularidades en diversos ayuntamientos en el 2017 destacando el municipio de San Andrés Tuxtla.
De esta forma, el presidente de la Comisión de Fiscalización Juan Manuel Unanue Abascal es quién exige al ORFIS que las quejas interpuestas, sean consideradas como elementos de revisión en las auditorías a la cuentas de la Públicas del Ejercicio Fiscal del año pasado.
Asimismo, se ha filtrado que la Auditoria Superior de la Federación estará denunciando a Rosendo Pelayo por la retención del impuesto sobre la renta a los trabajadores en el 2016 y que el actual Ayuntamiento lo estará denunciando también por Daño Patrimonial por las multas y recargos generados por la retención del “ISR” a los trabajadores desde el 2014.
Así que el expediente de Manuel “N” sigue y sigue en aumento.
Se tiene que decir, indudablemente tanto Santiago Avendaño y Manuel Rosendo estarán defendiéndose más que en lo legal, en lo mediático, asegurando que todos estas acusaciones forman parte de un “complot” o un golpeteo político.
Sin embargo, lejos de que pretendan victimarse, es la misma ciudadanía quién está exigiendo justicia y que si algo se comieron, simplemente que lo paguen.
El castigo a los corruptos, es el tema del momento, y, en todos los niveles.
Así las cosas.
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